24 ago Amor en tiempo real
Para la primera vez
que me la llevo a la cama
alquilé esta habitación.
Ella con gran rapidez
se desmelena y exclama:
– ¡Aprovecha la ocasión!
Yo, que tanto me conozco,
intento imponer la calma
y atrasar el desenlace,
pongo una de Antonio Orozco
para apaciguar mi alma
que está ya para el desguace.
¡Uy, qué rápido va esto!
Desi ya se ha desnudado,
mientras sigo en albornoz
y con el capuchón puesto
apuntando hacia el tejado,
voy gimiendo a media voz.
Para, para, frena, frena,
tranqui Desi, que ya voy…
Pienso con cierta zozobra
que si no entro ya en faena
acabo antes de empezar,
pongo manos a la obra
arrojándome en barrena
sin ningún preliminar.
Le planto la pica en Flandes
con tal efectividad
que la excitación me lleva.
Aunque no sea de las grandes
es grande en celeridad,
mejor que ahora no la mueva.
Para, para, frena, frena,
¡ay, que me voy, que me voy!
Quizás si pongo mi mente
en alguna otra cuestión
pueda atrasar el final.
He de comprar detergente,
pan, croquetas de jamón,
vino y yogur natural.
Mierda, ¿por qué habré pensado
en yogur? ¡Como me pone
esa textura cremosa!
¡Me pongo tan excitado
con esos cuerpos Danone!
¡Ya no hay quien pare la cosa!
¡Para, para, frena, frena!
¡Oh, dios, Desi, que me voy!
Breve pero intenso, nena.
¡Ya me fui! ¡Ya no me voy!
La versión de Desi de estos mismos sucesos está disponible aquí
Imágenes tomadas de ‘1977 TV Commercials’. Marcado como Dominio Público. Fuente: Internet Archive.